Por Antonio Arancio Gálvez, enviado especial a España

"Nos debíamos este reencuentro de caballos y jinetes españoles y chilenos… Galopar juntos en tierras andaluzas con nuestras banderas que se cruzan en colores comunes de tradición e historia. Blanca, azul y roja de Chile; Oro y grana de nuestros abuelos… España y Chile juntas ahora… Juntos de a caballo…".

Con estas sentidas frases se cerró el domingo la visita de la Escuadra Ecuestre del Criadero Palmas de Peñaflor a las Caballerizas Reales de Córdoba, en una actuación que puso fin a la exitosa gira europea del criadero chileno propiedad de Alfredo Moreno Charme.

Palmas se presentó en conjunto con Córdoba Ecuestre por tercera vez en este lugar ubicado en el casco antiguo de la ciudad que fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1994 por la Unesco. Fue el punto final de un periplo con un primer hito en el festejo de los 90 años de la Reina Isabel de Inglaterra en Windsor y luego este cruce de culturas con España y el "retorno al origen" del caballo y el huaso chileno.

"La misión está cumplida, y estamos muy contento por lo que se logró, por hasta donde llegamos con nuestro caballo, las tradiciones y atuendos huasos. Vivimos algo increíble, aunque también nos vamos con un poquito de pena porque se termina la gira después de tantas cosas lindas que vivimos. Se formó un gran grupo, recorrimos e hicimos un trabajo con mucho orgullo y responsabilidad", resumió el director de la escuadra, Alfredo Moreno Echeverría.

"Este es un equipo en el que cada uno tenía un trabajo y lo cumplió a cabalidad. Desde Chile se pudo seguir esta gira con mucha cercanía, fueron parte de esta gira a través de lo que se publicó en redes sociales y los medios de comunicación. Eso es impagable y hay que felicitar a todo el equipo de jinetes, bailarines, folocloristas, como también a CaballoyRodeo, a nuestro fotógrafo Jorge Reyes, a nuestro audiovidual Armando Marín, quienes lo hicieron increíble en su tarea de difundir", añadió.

"Ojalá en el futuro podamos seguir haciendo cosas como estas… porque son experiencias de vida únicas que llenan el alma de alegría", completó Moreno.   

Rafael Blanco, presidente de Córdoba Ecuestre, comentó que "vimos un show lleno de plasticidad enorme, además una combinación fantástica del caballo español y el chileno fantástica con ambas culturas en su mayor expresión. Vimos una mezcla con un origen común, el caballo español que ha evolucionado de una forma y que en América lo hizo de otra, pero manteniendo sus raíces. Hay muchas cosas en sintonía entre el folclore andaluz y el chileno".

"Aquí en las Caballerizas Reales se creó el caballo de raza española en el siglo XVII y es muy bonito recibir a caballos que fueron incluso anterior al nuestro, que son los que llegaron con Colón en el Siglo XV a América", añadió y destacó que "el caballo chileno es de una movilidad máxima, rápido, de una notable manejabilidad. De gran funcionalidad, más adaptado al trabajo de campo ante un animal".

"La cultura del caballo une la cultura de todos los países. Hemos estado y nos han visitado escuelas ecuestres de Austria, Francia, Portugal, y abrirnos a compartir con hermanos de América fue algo grandioso para Córdoba y el caballo español. Damos las gracias a la escuadra creada por Alfredo Moreno Charme", completó Blanco.  

El equipo en Europa

Los jinetes que estuvieron en la arena de las Caballerizas Reales fueron Alfredo Moreno Echeverría, Francisco Moreno Echeverría, Luis Eduardo Cortés, Juan Pablo Cardemil, Nicolás Cardemil, Rodrigo Cardemil, Francisco Donaire, Ignacio Hermosilla, Vittorio Cavalieri, Jorge Carrasco, Jaime Muñoz y Marcelo "Cuchulo" Cisternas.

Mientras que los caballos que entraron por última vez a la pista española fueron Palmas de Peñaflor Nacarita, Palmas de Peñaflor Misionero, Palmas de Peñaflor Alacrán, Palmas de Peñaflor Bandolera, Palmas de Peñaflor Benito, Amancay Gitana, El Paraíso Afortunado,  Alucarpa Caporal, Lo Hermida Tono, Vista Volcán Mal Hablada, San Remigio Templado, y Los Huañiles II Chinchel.

La voz en las cuecas y tonadas fue responsable de la destacada cantora Carmencita Valdés, quien fue acompañada con maestría por el arpa de José Luis Vergara.  La danza fue entregada con gran calidad artística de la compañía Evenmax dirigida por Andrés Alvarado y Mabel Acevedo, y sus bailarines fueron Victoria Gutiérrez, Valentina Castro, Camila Astroza, Constanza Uribe, Luis Ramírez, José Calderón, Tomás Manzo, Johan Castro y Alejandro González.

 En la producción y coreografía de los jinetes y caballos también trabajó Luciano Bustos.

Por su parte,  en el área veterinaria estuvo Pablo Miranda, quien será el encargado de acompañar a los caballos en su retorno a Chile, en un viaje que lo llevará por Francia hasta Amsterdam. En la ciudad holandesa tomarán un avión el viernes 27 de mayo para llegar a nuestro país al día siguiente.  

La delegación de Palmas de Peñaflor viajará ahora a Madrid, donde el miércoles 25 se embarcará rumbo a Santiago.